El enfermero Cristián Gálvez López, ha sido el director del Hospital de Peñablanca desde diciembre del año 2017 y mantiene una querella en el Juzgado de Garantía de Villa Alemana.
A comienzos de esta semana, y tras aceptar la renuncia voluntaria de Fernando Olmedo como director del Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio, el Ministerio de Salud ha nombrado en calidad de interino al enfermero Cristián Gálvez, lo que ha desatado las críticas de autoridades regionales agudizando aún más la crisis dentro del sistema de salud pública en la Región de Valparaíso.
Las muertes de tres lactantes por virus sincicial este 2023 se suman a las denuncias que ha hecho el propio gobernador regional, Rodrigo Mundaca, quien sostiene una opinión bastante crítica del sector. Refiriéndose al convenio Gore-Minsal activo desde 2018, menciona que “a la fecha no he logrado reunirme con la ministra de Salud para conocer sus prioridades en este ámbito”.
La falta de ambulancias y otros servicios en el sistema, para lo cual el Gore ha tenido que hacer una inversión sobre los $2 mil millones, demuestran “la precariedad del sector”, reafirma Mundaca.
Visión compartida por personeros de la comisión de Salud del Consejo Regional, aludiendo a la falta de conducción en salud pública en la región y a un total abandono del Gobierno. Manuel Millones manifestó que “este cambio da cuenta de una ministra con escaso conocimiento de la realidad regional y escaso o nulo compromiso con los servicios de salud de la zona”.
Aludiendo al nuevo director interino, el consejero regional añadió que “el Gobierno tiene la obligación de que la persona que sea nombrada como director debe tener las competencias y el conocimiento”.
Según constata en un diario regional, el enfermero Cristián Gálvez López – quien asumió el cargo de director del Hospital de Peñablanca en diciembre de 2017, mantiene una causa legal en el Juzgado de Garantía de Villa Alemana.
La querella criminal, fue presentada el 15 de junio y declarada admisible (por lo que sigue en tramitación legal) por una funcionaria del Hospital de Peñablanca que denunció a Gálvez por haber falsificado instrumento público por presionarla ante una renuncia.