Esta semana marcó un hito significativo con la publicación del informe final de la Comisión Especial Investigadora (CEI) de la Cámara de diputados por el 2F, justo cuando se acercan seis meses desde el devastador megaincendio que azotó la región de Valparaíso.
Esta comisión parlamentaria dedicó más de tres meses a examinar detalladamente el desempeño del Estado durante la catástrofe, la cual cobró la vida de 137 personas y dejó 8 mil hogares destruidos. Entre las conclusiones preliminares ya conocidas destacan las «negligencias inexcusables» de Conaf en el manejo y la predicción del incendio, así como un sistema «arcaico» por parte de Senapred en el monitoreo de emergencias, además de «errores inexcusables» cometidos por la Delegación Presidencial de Valparaíso.
MUNICIPALIDAD DE VIÑA
Sin embargo, el informe final revela una nueva dimensión al establecer responsabilidades adicionales, especialmente hacia la Municipalidad de Viña del Mar. Esta entidad fue interpelada por presentar «falencias» significativas en su Plan Comunal de Emergencia, lo que resalta la importancia de una preparación adecuada y coordinada en situaciones de emergencia de esta magnitud.
Las críticas hacia estas instituciones no solo apuntan a sus acciones directas durante el desastre, sino también a sus protocolos de respuesta y preparación previa, como el hecho de que la ciudad no contaba con cortafuegos necesarios.
La CEI del 2F, mediante su extenso trabajo investigativo, ha subrayado la necesidad urgente de reformas y mejoras estructurales dentro de las entidades gubernamentales involucradas. Estas reformas no solo deberán abordar las deficiencias específicas identificadas en Conaf, Senapred y la Delegación Presidencial, sino también en los municipios, como Viña del Mar, que deben fortalecer sus capacidades para manejar emergencias de manera efectiva y oportuna. Este informe final representa un llamado a la acción para implementar cambios concretos que puedan prevenir futuros desastres similares y proteger mejor a las comunidades vulnerables frente a situaciones de emergencia.
La conclusión de la investigación parlamentaria destaca la necesidad urgente de mejorar la gestión y la preparación ante desastres naturales, señalando responsabilidades claras no solo a nivel estatal sino también municipal. Este proceso de evaluación crítica y recomendaciones proactivas es crucial para garantizar una respuesta más efectiva y coordinada en el futuro, minimizando así el impacto devastador de eventos como el megaincendio que afectó gravemente a la región.
