El Consejo para la Transparencia (CPLT) ha revelado los resultados de su más reciente fiscalización sobre el uso de fondos provenientes de casinos de juegos, centrando la atención en las municipalidades y gobernaciones regionales entre los años 2019 y 2022.
En este informe, se evaluó la transparencia y rendición de cuentas de estos recursos, verificando si se destinaban efectivamente a proyectos de desarrollo local, como lo exige la Ley sobre Casinos de Juego.
Según el informe, en 2022, Viña del Mar se ubicó entre las principales comunas en cuanto a recaudación de dineros por impuesto específico al juego, con un total de $4.777 millones. Convirtiéndose en la segunda ciudad que más recauda, tras Mostazal (Región de O’Higgins).
CPLT CRITÍCA
El presidente del CPLT, Bernardo Navarrete, destacó que, a pesar de los altos montos recaudados, los recursos de los casinos en Viña del Mar y otras comunas no siempre se han utilizado para fines estrictamente relacionados con el desarrollo local.
“A partir de los datos obtenidos tras esta fiscalización, se observa que hay fondos provenientes de los impuestos de los casinos utilizados por las municipalidades en transferencia de recursos a otras entidades, contratación de personal a honorarios, celebraciones o conmemoraciones, estudios y asesorías, cobranzas judiciales, entre otros,” indicó Navarrete. Estos usos se desvían del concepto de obras de desarrollo “directo e inmediato” que estipula la ley.
En la región de Valparaíso, en general se concentró una ganancia cercana a los $9 mil millones cada una. Estos recursos se integran al Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) y representan un porcentaje significativo de la inversión regional total.