Cynthia Burgos Sánchez es una bióloga marina apasionada por la conservación y el estudio de la biodiversidad. Estudió en la Universidad Austral de Chile, una institución que ella considera como la mejor en su campo, y actualmente está finalizando su tesis de magíster en ciencias para la conservación y biodiversidad. Desde el inicio de su carrera, y durante los últimos 30 años ha trabajado en el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura de la Región de Valparaíso, recorriendo diversas regiones y adquiriendo una perspectiva amplia y profunda sobre la situación del sector pesquero en el país.
Burgos ha estado involucrada en importantes iniciativas en el servicio público que han promovido la regulación y registro de pescadores artesanales y acuicultores, además de abordar los desafíos asociados con la sostenibilidad en la pesca. Su compromiso con la conservación ambiental y el trabajo en terreno han marcado su trayectoria profesional, destacándose por su perseverancia y su enfoque en el bienestar colectivo.
Con una visión crítica sobre los efectos de la industria en el medio ambiente y una sólida vocación de servicio público, su carrera es un ejemplo de dedicación en un área mayormente dominada por hombres.
Su historia es la de una mujer que, inspirada desde la niñez por el océano y los misterios de la naturaleza, ha desafiado estereotipos y se ha ganado un lugar destacado en su profesión. En esta entrevista, Cynthia comparte sus reflexiones sobre su carrera, sus logros y las lecciones aprendidas, brindando además consejos a las nuevas generaciones de mujeres interesadas en las ciencias.
Carrera de Cynthia
¿Puedes contarnos sobre tu trayectoria académica y profesional? ¿Qué te inspiró a elegir una carrera en STEM?
Desde pequeña, sentí una conexión muy fuerte con el mar. Mi familia y yo solíamos ir a la playa, y eso alimentó mi curiosidad por el océano y la naturaleza. Más tarde, en la universidad, esa atracción se convirtió en una vocación que me llevó a estudiar biología marina en la Universidad Austral de Chile. No tuve ninguna duda de que quería dedicarme a las ciencias del mar, ya que siempre me atrajo explorar lo desconocido, como los ecosistemas antárticos y los fondos marinos. Actualmente, trabajo en el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, donde contribuyo a la conservación y regulación de los recursos marinos.
¿Cuáles han sido los mayores desafíos que has enfrentado como mujer en un campo predominantemente masculino? ¿Cómo los superaste?
Cuando estudié, era una carrera pequeña, y las mujeres éramos minoría. Uno de los desafíos era que muchas veces, para ser aceptada, sentía que tenía que «ser como los hombres». Incluso en situaciones simples, como el uso de los baños, no había consideración de nuestras necesidades. Además, al trabajar en un entorno masculinizado, siempre se está bajo observación. Cualquier error puede ser atribuido al hecho de ser mujer. Para superarlo, me enfoqué en demostrar mis capacidades y ser constante en mi trabajo. Hoy en día, se ha avanzado mucho en términos de equidad, pero todavía queda camino por recorrer.
¿Has tenido mentores o figuras inspiradoras en tu vida? ¿Cómo han influido en tu desarrollo profesional?
Sí, he tenido varios mentores que han sido fundamentales para mí. Durante mis estudios, tuve el honor de tener como tutor al doctor Jürgen Winter, un biólogo marino alemán que nos guió y apoyó a muchos en nuestra generación. Además, Marie Curie ha sido una inspiración para mí desde siempre. Su dedicación, sus logros científicos y su rol como madre me han inspirado profundamente. Su vida es un recordatorio de la importancia de la persistencia y el amor por la ciencia.
¿Cuál consideras que ha sido tu mayor logro en tu campo y por qué es significativo para ti?
Para mí, el logro más significativo ha sido poder contribuir al servicio público de forma consistente durante todos estos años. He sido parte de un esfuerzo colectivo, donde junto a muchos colegas hemos trabajado para fortalecer la regulación y conservación de los recursos marinos en el país. Además, me enorgullece haber ayudado a poner en la palestra temas de sostenibilidad y conservación que, hace años, no eran una prioridad. Hoy, temas como la crisis climática y la protección de los ecosistemas marinos son reconocidos como urgentes, y haber aportado a esa conciencia colectiva es algo que me llena de satisfacción.
Futuro Stem
¿Cómo crees que la diversidad de género influye en la innovación y el desarrollo en STEM?
La diversidad de género en STEM es fundamental. La inclusión de mujeres aporta una perspectiva diferente que enriquece los equipos y contribuye a soluciones más integrales. En mi experiencia, el talento femenino complementa al masculino, y juntos se logran avances significativos en la ciencia y la conservación. Necesitamos más mujeres en STEM para desafiar las visiones tradicionales y avanzar hacia un enfoque más inclusivo y sostenible.
¿Qué consejo le darías a las jóvenes que están considerando una carrera en STEM?
Les diría que sigan sus sueños y no se dejen intimidar por los obstáculos. La biología y la ciencia son carreras maravillosas que les permitirán conocer el mundo de una manera única. Además, es esencial que aboguen por la conservación de la vida y que no pierdan de vista la importancia de sus contribuciones para cambiar el mundo.
¿Estás involucrada en alguna iniciativa o proyecto que promueva la inclusión de mujeres en STEM? ¿Puedes compartir más sobre ello?
Además de mi rol en el servicio público, he sido parte de iniciativas gremiales que buscan mejorar las condiciones laborales de las mujeres, especialmente en términos de conciliación entre trabajo y familia. Hemos logrado avances importantes, como políticas de flexibilidad laboral, que hoy benefician tanto a hombres como a mujeres, y que permiten equilibrar las responsabilidades personales con el trabajo.
¿Cómo ves el futuro de las mujeres en STEM? ¿Qué cambios esperas ver en los próximos años?
Veo un futuro prometedor para las mujeres en STEM, con cada vez más políticas que promuevan la equidad y la inclusión. Espero que en los próximos años haya más mujeres en roles de liderazgo, donde todavía estamos subrepresentadas. Este cambio es esencial para que la ciencia refleje la diversidad de la sociedad y para crear un ambiente de trabajo más justo.
¿Cómo logras equilibrar tu carrera en STEM con tu vida personal y otras responsabilidades?
Equilibrar la vida personal y profesional ha sido uno de los mayores desafíos, especialmente al ser madre. En el pasado, la conciliación era muy difícil, y muchas veces tuve que sacrificar tiempo con mi familia. Sin embargo, gracias a los avances en políticas laborales, hoy es posible encontrar un balance, lo cual es fundamental para seguir motivada y feliz en el trabajo.
¿Qué legado te gustaría dejar en tu campo y cómo esperas inspirar a futuras generaciones de mujeres en STEM?
Mi mayor deseo es contribuir a la conservación del océano y los recursos marinos, dejando un ejemplo de compromiso y amor por la naturaleza. Espero inspirar a las futuras generaciones a trabajar por la vida en todas sus formas y a perseguir sus sueños en la ciencia, sin importar los obstáculos. Necesitamos más personas que luchen por un mundo sostenible y justo, y creo que las mujeres pueden liderar este cambio.
Cynthia Burgos Sánchez es una bióloga marina apasionada por la conservación y el estudio de la biodiversidad. Estudió en la Universidad Austral de Chile, una institución que ella considera como la mejor en su campo, y actualmente está finalizando su tesis de magíster en ciencias para la conservación y biodiversidad. Desde el inicio de su carrera, ha trabajado en el Servicio Nacional de Pesca y Agricultura de la Región de Valparaíso, recorriendo diversas regiones y adquiriendo una perspectiva amplia y profunda sobre la situación del sector pesquero en el país.
